Se desborda la fe religiosa en este Domingo de Ramos.

Miles acuden a escuchar misa y bendecir sus Palmas.

Por: Rafael Hernández R.

TLILAPAN, Ver. Este domingo de Ramos  inicio de la semana mayor o semana santa se desbordó la fe religiosa y acudieron miles de familias a encontrarse con Dios, así mismo en el municipio de Tlilapan, realizaron las autoridades religiosas una peregrinación a dónde sacan de su casa al santo Patrón Santiago Apóstol y con pétalos los niños mariposa van regando por las calles hasta encontrarse con decenas de familias d la comunidad de Acatepeaca.

Ahí, sahumaron al santo Patrón lo recibieron y ahora todos juntos regresan de nueva cuenta en peregrinación a su casa  a donde antes de entrar  le riegan desde lo alto de la iglesia baño de pétalos de rosas y recibir a toda la gente católica para escuchar misa.

Ahí el Mandón  municipal Juan Carlos Núñez Luna y Ambrosio Barreto, Placido Puertos,  así como mayordomos y fiscales aseguraron que esta tradición de los niños Mariposa que las denomina así porque se visten todos de blanco, tradición que se rescató después  de treinta años y hoy fu muy vistosa y reconocida por la población católica.

Así mismo, recalcaron que la Palma se entregó en casa por casa de manera respetuosa y gratuita, así  de esta manera se cumple con el inicio de la semana santa que culmina hasta el próximo sábado de Gloria y que hoy como en otros tiempos las familias salieron a las calles a acompañar al Santo Patrón n su peregrinar por las calles de Tlilapan.

“Con la bendición de las Palmas y de escuchar la misa se siente aún que en este municipio tenemos un cien por ciento de nuestra población que cree en la religión católica y que hoy más que nunca debemos de escuchar la palabra de Dios, porque estamos muy necesitados de que nuestra conciencia está  tranquila y entender a los demás.

Ahí fuera de la iglesia de Santiago Apóstol se notó la venta de Aguas de sabores, frutas, Palmitas, discos compactos, tamales, memelas, garnachas, tortas y todo tipo de vendimia tradicional  ya que hoy las familias prefieren comer y convivir en las jardineras de las iglesias o a algún lugar turístico familiar.