Roberto Beristain de 43 años, está bajo custodia de la Oficina de Inmigración y Ciudadanía (ICE, pos sus siglas en inglés), desde el 6 de febrero en Indianapolis.
Beristain de nacionalidad mexicana, ingresó a Estados Unidos de forma ilegal hace 20 años y podría ser deportado este viernes por un incidente de tráfico.
El mexicano es dueño de un restaurante de carne en Granger y en el 2000 debido a un giro equivocado cuando vacacionaba con su familia en las Cataratas del Niágara, fue arrestado al ir a parar a la frontera canadiense.
Beristain pagó 1,500 dólares de multa y recibió una orden de deportación con 60 días para abandonar el país, sin embargo, logró revertirla con una orden de remoción.
Su familia promueve una petición para evitar su deportación.
El mexicano rehizo su vida en Estados Unidos, obtuvo una licencia, un carnet de seguridad social y un permiso de trabajo, sin embargo, en febrero de este año, 16 años después del incidente de tránsito, fue arrestado como parte de la entrada en vigencia de las nuevas políticas del presidente Donald Trump.
Irónicamente, Helen Beristain, esposa de Roberto, votó por Trump creyendo que sólo los asesinos e integrantes de los cárteles de la droga serían deportados:
“Trump dijo que la gente buena no debería ser deportada; la gente buena debería ser revisada”, acotó Helen.
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