Ivanka, flanqueada por Donald Trump y Justin Trudeau, sonríe mientras está sentada en la silla presidencial del Despacho Oval. “Una gran conversación con dos líderes del mundo sobre la importancia de que las mujeres tengan un lugar en la mesa”, escribió a través de su cuenta en Twitter.
A great discussion with two world leaders about the importance of women having a seat at the table! 🇺🇸🇨🇦 http://pic.twitter.com/AtiSiOoho0
— Ivanka Trump (@IvankaTrump) 13 de febrero de 2017
La imagen ha herido las susceptibilidades nacionalistas de algunos estadounidenses que ven en esa habitación un símbolo y el centro de la gravedad política de la nación norteamericana y del mundo; es también el lugar elegido por los mandatarios estadounidenses para dirigirse a la nación en los momentos más solemnes o críticos.
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